La Intuición, una gran aliada en la toma de decisiones

A mí, la Intuición siempre me ha parecido una estupenda aliada en mi toma de decisiones. Y ¿para ti, lo es?

La intuición te empuja a actuar. Te dice: ‘Es un por aquí’, ‘¡Tira millas y aprovecha esta oportunidad, no lo dudes! O, todo lo contrario: ¡Ni se te ocurra! ¡Frena Por aquí no! También te suele dar mensaje del tipo: ‘Algo no me cuadra…,’ ‘estate atento’. Y el cuerpo suele reaccionar acorde a ello. Te pone en movimiento, está incomodo, el estómago te avisa y se te hace un nudo o sientes la serenidad de que has tomado la decisión correcta para ti.

Los que me vais leyendo, ya sabéis que antes que nada me gusta poner las cosas en contexto. Tener un marco de referencia y muchas veces lo que hago es definir la palabra o concepto sobre el que gira el post. Yo defino la intuición como el conocimiento y la experiencia acumulada que tenemos bien digeridos y que llevamos incorporados en nuestro propio criterio. El nuestro, no el que nos dicen desde fuera que debemos tener.

Steve Jobs el 12 de junio de 2005 dio un discurso en la ceremonia de graduación de la Universidad de Stanford que se titulaba: ‘Atrévete a seguir tu intuición’. Cuando di con el discurso por casualidad en una librería preciosa de Vic, no dudé ni un segundo en llevármelo a casa. El discurso es muy interesante y vale la pena leerlo y releerlo. Steve Jobs es un claro ejemplo de una persona que cuestionó el paradigma de que para tener resultados hay que basar tus esfuerzos en la disciplina y el sacrificio, él puso primero su intuición, se escuchó y siguió el camino que él escogió, no el que le decían que tenía que seguir. Steve Jobs fue fiel a sí mismo.

Que quiero destacar de su discurso y que más me inspira:

• Atas cabos mirando hacia el pasado, no hacia el futuro. Mirando hacia el pasado es cuando entiendes por qué en un momento determinado le hiciste caso a esa corazonada sin dudarlo aun teniendo varios argumentos para hacer lo contrario.
• Encuentra lo que te entusiasma, lo que te apasiona. A Steve Jobs lo despidieron de Apple. Pero como le apasionaba lo que hacía, no dejó de hacerlo y fundó NeXT y Pixar. Pasados unos años Apple compró ambas empresas y Steve Jobs se encontró de nuevo en la compañía iniciando un periodo de gran creatividad. Si, Steve Jobs hubiera tomado decisiones en ese momento basadas única y exclusivamente en la racionalidad y la prudencia que la suele acompañar… ¿qué habría ocurrido? Estoy convencida de que recibió mayormente consejos que le aconsejaban que hiciera lo contrario de lo que acabó haciendo
• Nuestro tiempo tiene un límite, no somos eternos y se trata de que vivamos nuestra propia vida. Muy fácil de decir ¿verdad? Pero no por esto debemos dejar de persistir en averiguar cómo la queremos vivir y hacer todo lo que está en nuestra mano para hacerlo. La sensación de plenitud que tienes cuando te sientes realizado es difícil de explicar, pero maravillosa de vivir. La Intuición es de gran ayuda para ello. La intuición es fantástica para separar el ruido de las opiniones ajenas y tomar consciencia de cuál es tu voz interior y aprender a escucharla

Y añado 3 reflexiones más que ya son de mi propia cosecha:

• Nos han enseñado en la escuela principalmente, a través de los exámenes, que hay respuestas correctas o incorrectas… pero en la realidad, sin entrar en cuestiones éticas, pocas veces es así. Cada uno de nosotros tenemos nuestra propia personalidad, nuestra esencia. Cuando vivimos en coherencia con quien somos (propósito, creencias y valores) ya nos pueden venir con grandes argumentos y razonamientos que seremos fieles a quienes somos sin dudarlo.
• Sin intuición pocos riesgos se asumen. La razón es una gran aliada del miedo. Lo que nuestra mente quiere es que lleguemos a la noche habiendo gastado el mínimo de energía, que nos hayamos alimentado y que tengamos nuestras necesidades cubiertas, no que estemos alineados con nuestro propósito y objetivos.
• ¿Qué mandatos acarreamos? Un mandato es una “orden” externa a nosotros que nos obliga a hacer alguna cosa o a cumplir una misión. Se trata de una tarea impuesta que ni nos representa ni nos pertenece. Si nos paramos a pensar, ¿Cuántas personas conoces que no hacen otra cosa en la vida que cumplir con mandatos ajenos de manera inconsciente? ¿Los ves felices? ¿Transmiten esa serenidad que te da vivir siendo fiel a ti mismo?

La intuición es la puerta que nos da entrada a conectar con nuestra esencia y ser coherentes con quien realmente somos. Vale la pena darle voz, escucharla y luego coordinarla con nuestra razón y reflexión para decidir qué pasos dar para vivir una vida con plenitud y sentirnos vivos y sobre todo realizados.

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